Realidad

Bienvenid@s,

  A día de hoy, nuestra sociedad podría estar convulsa por muy distintas razones, las últimas y por resumir, la aparición del primer caso de Ébola por contagio fuera de África, la imposición de 17 años de inhabilitación al juez que mandó al causante del mayor desfalco bancario de España a prisión y la desimputación de los responsables de Adif en el accidente del tren Alvia en Santiago de Compostela o lo que es lo mismo, la asignación de la responsabilidad únicamente al conductor del mismo. Estas son las últimas razones para la indignación a las que pueden acompañar la aparición de las tarjetas 'black' en Caja Madrid, el caso Pujol, el pago de 1350mill € a ACS por una obra que nunca realizará, el aumento de los desahucios, el aumento de la represión policial, la evidente corrupción en el ejército, etc. esta lista se podría hacer eterna, se podría acercar al día a día si incluyéramos la realidad de los millones de españoles que luchan por seguir adelante en condiciones cada vez más precarias pero desde luego es el simple reflejo de una élite dirigente incapaz.

  La realidad, esa que acabamos de tratar de resumir, la que es reflejo de unos líderes incompetentes, también habla de nosotros como pueblo; es complicado encontrar un por qué, pero es evidente que nos dejamos llevar o engañar por aquellos que no paran de demostrarnos que nos utilizan como herramienta para vivir por encima de las posibilidades de todos. Podemos hablar de incultura, de falta de conciencia, de un capitalismo que utiliza el deseo de la gente de ser felices para esclavizarlos en un sistema que ocupa la mayor parte de tu día a día en una clase de supervivencia a través de un trabajo que agota tu energía vital y tus ganas de implicarte en la gestión o en temas globales de la sociedad en la que vives. La realidad es que ya tienes bastante con buscarte la vida, como para pararte a pensar en como quieres que la sociedad sea o actúe y ya no digamos en dedicarle tiempo a trabajar para que tu idea de los social se cumpla.

  La tecnología tenía que traernos más facilidades, debería darnos más tiempo a los humanos para vivir; una evidente prueba es la reducción de mano de obra que toda la tecnología conlleva al aplicarse al trabajo, sin embargo, seguimos en horarios dados por las luchas obreras de la época industrial, cuando las manos realizaban tareas que ahora las máquinas repiten incansablemente y de manera más eficiente que los primeros obreros.

  Las diferencias sociales han existido desde que el hombre creo la sociedad, cada época las ha marcado a su manera y desde luego existen antecedentes de mayor diferencia social, pero acaso no estábamos buscando su desaparición y no su continuidad? La realidad tecnológica nos dice que finalmente en lugar de buscar la equidad y la liberación, la tecnología nos está llevando a la desigualdad; no la tecnología en sí, si no el uso que el capitalismo hace de ella. En lugar de reducir las horas de trabajo, reduce los hombres trabajando, en lugar de igualar los salarios, los separa aún más, minusvalorando el trabajo de los nuevos obreros y utilizando los beneficios que ello conlleva en elevar aún más las condiciones de los que gobiernan.

  Entiendo que el mecanismo no se puede parar y que es duro pedir a la gente el sobreesfuerzo que llevaría dedicar tiempo a lo social, pero las oportunidades están para aprovecharlas. El reflejo de los datos de paro, el triste reflejo, es que al obrero no empleado le queda tiempo para movilizarse y para dedicarse a lo social, que parece que esto lo han entendido antes que nosotros las clases dominantes y ya buscan mediante el trabajo precario resolver este "problema" para seguir con el ciclo, pero también que mientras nos vuelven a meter en la rueda, es nuestro momento para hacer que esta descarrile.

  Es el momento de las acciones valientes, de despertar y ver esta realidad y buscar un cambio y estos momentos ni duran mucho, ni se dispone de ellos eternamente; debemos darnos cuenta  de que es ahora y no luego cuando tenemos la oportunidad de reclamar igualdad y que esto no va a pasar por cerrar los ojos o por creernos las nuevas mentiras y sobre todo, que no va a ser fácil.

  Cuando abres tu ojos y lo que ves a tu alrededor no te gusta, cerrarlos no te transportará a un mundo mejor, ni los resolverá, cerrarlos sólo te hará vivir en la mentira, pero la mentira, como siempre pasa, acaba siendo descubierta.

Saludos y suerte.